Nos ha costado mucho comenzar a escribir este artículo, ya que el resultado de la formación de 14 horas intensivas que le hemos ofrecido a Virginia Pons Lekue (co-propietaria de la empresa de Regalos Gastronómicos Exclusivos “LeBigott”), ha sido más que sorprendente, y todavía nos cuesta explicarlo.

Para empezar, comenzaremos con sus reflexiones al finalizar su formación: “NO BUSCABA ESTO AL CONTRATAROS, PERO HA SUPUESTO UN PUNTO DE INFLEXIÓN EN MI VIDA”. Para concluir diciendo: “AHORA ESTOY EN PAZ”.

Curiosas conclusiones para un “objetivo no cumplido”. Y es que su petición cuando se puso en contacto con nosotros vía telefónica fue: soy sumiller y quiero darle un valor añadido a mi trabajo con los clientes. Ella nos pedía herramientas, y nosotros le hemos ofrecido una caja para ellas.

¿Cómo aunar en 14 horas de curso intensivo, todos nuestros años de experiencia y formación, para que Virginia pudiera realizar un trabajo similar al nuestro con sus clientes?; pues dándole un valor añadido a la formación………………………………………………………………………… siendo nosotros mismos.

La formación se ha repartido en 14 horas lectivas, más una mañana para conocer a “LeBigott”, esa original, elegante y pomposa tienda de Regalos Gastronómicos Exclusivos. Aunque más que pomposa y recargada, Jaime (padre de Virginia, co-propietario de la empresa y propietario de SU BIGOTE), la definiría como “estrategia de marketing”. Y la verdad, con mucho sentido; un sentido que no vamos a desvelar aquí.

La primera mañana hemos comenzado con una entrevista a Virginia, una persona decidida, curiosa, atenta, segura… y sobretodo con muchas ganas de prosperar y una idea de futuro profesional en la cabeza. Durante la realización de la entrevista, a través de un «tour», hemos conocido “LeBigott”, ese “centro neurálgico gastronómico”, bellamente decorado y repleto de historia familiar.

Y a partir de ahí, nos hemos hecho tod@s co-participes de la construcción de la caja de herramientas, no tan bonita como los estuches que preparan para sus clientes, pero os aseguramos que con la misma profesionalidad y cariño.

En este sentido Virginia, te damos las gracias por el regalo que ha supuesto para nosotros tu atención y curiosidad en la formación. Además, con una actitud de aprendizaje y honestidad tan claras. Pero no solo por esta actitud, sino por el riesgo a sumergirte en un ámbito tan desconocido para ti…con los “ojos cerrados”, tanto en un sentido literal, como figurado.

Y todo ello con un espectador de fondo. Mostrando respeto hacia su hija, desde su silencio e intervenciones, aportando en los momentos oportunos su………EXPERIENCIA. Un hombre curtido, tremendamente jovial, ilusionado y muy motivado. Una persona que con un solo comentario en las reflexiones finales del curso, nos ha dado uno de los más bonitos regalos que podríamos recibir; nos ha dicho: “lo más importante es tener un proyecto de vida” (Jaime Pons). Sencillamente, GRACIAS Jaime.

La formación se ha desarrollado, no solo a través de contenidos teórico-prácticos, sino a través de historias, secretos, anécdotas, curiosidades, risas, generosidad, mucha generosidad, cariño, afecto, degustaciones, cercanía profesional, lecciones de vida….

Utilizando los sentidos al 100%, SIEMPRE…

Así que tras 3 días de formación, ambas partes nos llevamos algo. Virginia se queda con una “caja de herramientas”. Una caja de herramientas que tiene como fondo algo muy inusual, un espejo. Esperamos que encuentre en la caja todo lo que necesite.

Nosotros nos hemos vuelto a Valencia, con algo más que nuestra fabulosa satisfacción por haber realizado aquello que nos apasiona: formar a personas en Mindfulness y Mindful Eating. También nos hemos vuelto a Valencia, con una sensación especial, el sentimiento de formar parte de una nueva familia.

GRACIAS VIRGINIA, GRACIAS «LEBIGOTT»,  POR FORMATE CON NOSOTR@S.

Francisca Anaya y Alejandro Camacho